La empresa Strong Bull, especializada en diseñar y fabricar maquinaria para carpintería metálica y PVC, ha iniciado una nueva etapa con Francisco Javier Rioboó como nuevo CEO. Este relevo en la dirección, que marca la salida del fundador José María Rioboó, es una parte esencial de su Plan Estratégico 2030, cuyo objetivo es fortalecer la posición de la empresa en el competitivo mercado industrial.
Desde su creación en 1997, Strong Bull ha ganado renombre por la calidad y la innovación de sus productos, que incluyen desde maquinaria para el corte y ensamblado de materiales hasta equipos para el plegado y acristalado. Todos estos desarrollos son diseñados internamente, lo que refuerza el enfoque de la compañía en ofrecer soluciones patentadas y de vanguardia.
El nuevo plan se basa en tres pilares fundamentales: el relevo generacional, la modernización tecnológica y la expansión internacional. Con el cambio de liderazgo, se busca mantener el legado familiar a la par que se introducen prácticas modernas de gestión. La modernización incluye significativas inversiones en tecnología y digitalización. Strong Bull está abocada al desarrollo de prototipos más eficientes y conectados, alineados con las demandas del mercado actual.
En términos de expansión, la compañía apunta a consolidar su presencia en mercados clave como España, Francia y Portugal. Asimismo, tiene contemplado explorar nuevas oportunidades de negocio que incrementen sus exportaciones y refuercen su posición como aliado global para talleres e industrias especializadas.
Francisco Javier Rioboó subraya que esta hoja de ruta no solo proporciona claridad en la dirección futura de la empresa, sino que también reafirma su compromiso con valores de innovación y calidad, además de proximidad al cliente, un aspecto esencial en su evolución continua. Con estas estrategias, Strong Bull busca enfrentar los próximos diez años con una oferta de valor robusta, adaptada a los desafíos de la industria 4.0, manteniendo su reputación como un líder en el sector.