En el reciente AI Accelerator Institute Summit celebrado en Nueva York, el cofundador y CEO de Barndoor AI, Oren Michels, participó en una conversación con el profesor Alexander Puutio para abordar un tema crucial: la razón por la que muchos pilotos de inteligencia artificial no logran avanzar y cómo desbloquear su verdadero potencial en el sector empresarial.
Barndoor AI, fundada en mayo de 2025, se centra en resolver problemas de acceso a datos y seguridad en la gestión de agentes de IA. Durante el evento, Michels subrayó la urgencia de mejorar las estrategias actuales, las cuales considera ineficaces en muchos casos. Según Michels, los verdaderos retos aparecen en la etapa de implementación, donde los proyectos a menudo no ofrecen resultados concretos.
Michels mencionó un ejemplo concreto: un CEO que, ilusionado al principio con la IA, abandonó el proyecto tras enfrentar numerosos problemas en solo tres meses. Esto, según Michels, se debe a conceptos erróneos respecto a cómo la IA se integra en el entorno laboral, donde las interacciones no son únicamente conversacionales, sino orientadas al uso de herramientas y datos específicos.
Ambos especialistas coincidieron en que la tecnología por sí sola no es el problema principal, sino la desconexión entre las expectativas generadas y la capacidad real del sistema. La falta de acceso específico a herramientas de IA y la comprensión insuficiente de los problemas empresariales subyacentes son factores críticos que impiden el éxito.
Además, discutieron la necesidad de definir claramente los límites de acción de los agentes de IA en el ámbito empresarial, destacando que invertir recursos sin una estrategia clara no asegura el éxito. Oren abogó por crear agentes especializados en lugar de depender de un único sistema que intente hacerlo todo, lo cual ayudaría a las empresas a adaptarse mejor a sus necesidades.
Finalmente, enfatizaron la importancia de mantener una supervisión humana y adoptar un enfoque gradual en la asignación de responsabilidades, similar a la incorporación de nuevos empleados. Este enfoque busca equilibrar la confianza en la tecnología con una gobernanza adecuada para proteger los intereses empresariales y asegurar el uso responsable y efectivo de la inteligencia artificial.