Akash, cofundador y director ejecutivo de Bellum.ai, ha emergido como un referente en la creación de sistemas de inteligencia artificial (IA) confiables para el sector empresarial. En una reciente conferencia, compartió su experiencia acumulada a lo largo de varios años trabajando con un gran número de organizaciones que han integrado la IA en sus procesos. Su propósito es delinear prácticas efectivas, señalar aquellas que no lo son y proyectar el futuro del desarrollo de la inteligencia artificial.
El interés de Akash por la IA data de hace unos cuatro o cinco años, coincidiendo con los inicios de la pandemia de COVID-19. Durante ese tiempo, comenzó a experimentar con la API de GPT-3, una tecnología en estado incipiente que, pese a generar respuestas erráticas, mostraba una sorprendente capacidad para completar frases de manera coherente. En su trabajo en desarrollo de software para reclutamiento, implementó IA en la creación de descripciones de puestos y clasificación de correos electrónicos. Esta innovación impulsó la viralización de su generador de descripciones, subrayando el potencial de la automatización basada en inteligencia artificial.
A pesar de sus logros, Akash subraya que la puesta en marcha de estos modelos en entornos de producción no fue sencilla. La ingeniería de indicaciones, la evaluación de resultados y la integración con procesos existentes presentaban dificultades notables. Sin embargo, la situación se transformó en noviembre de 2022 con la llegada de ChatGPT, marcando un hito en la popularización de la IA. Los retos que Akash enfrentó, como asegurar la fiabilidad y fomentar la colaboración, se convirtieron en preocupaciones comunes en múltiples industrias.
Frente a este nuevo escenario, Akash y sus cofundadores lanzaron Bellum.ai, con el objetivo de ayudar a las empresas a explotar eficazmente los modelos avanzados de lenguaje (LLMs) y desarrollar sistemas de IA sólidos. Su experiencia en McKinsey también le proporcionó un valioso entendimiento sobre la gobernanza de la IA y la evolución de sus tecnologías. El impacto creciente de los modelos GPT en diversos sectores confirmó su convicción sobre la necesidad de marcos organizados para la implementación de la inteligencia artificial.